lunes, 3 de septiembre de 2007

Apoyas tu cabeza en mi hombro, como descansando de los males del mundo, tomas mis manos y las acaricias, como para compensar dolores pasados, no quieres que hablemos, solo que miremos el horizonte juntos, mirando la caída vertical de la gaviotas en busca de su presa, el respirar de los árboles en nuestra espalda, el baile continuo de las ramas tocándose unas con otras y el ruido que hacen las olas chocando con las rocas. Aparecen las primeras estrellas, empieza a hacer frió, pero no quieres entrar a la cabaña, es tu ultimo fin de semana como soltera, se acerca a pasos agigantados el día en que tengas que firmar en un libro la pertenencia de tu vida a otra persona, estas cansada y aburrida de probarte el vestido, de coordinar lo de las invitaciones, la iglesia, el civil y la comida, pero por que quisiste pasar el ultimo fin de semana de señorita conmigo?, no entendí muy bien la llamada, la insistencia, el casi rogar para que te acompañara, el beso en la mejilla al momento de encontrarnos, me miraste todo el viaje, besaste mis manos a cada rato, te apoyaste en mi y cada cierto rato escapaban suspiros cortos, todavía te ríes con eso de los chinos, eso de que por cada suspiro muere un chino, siempre digo lo mismo y todavía te ríes.

Pediste comida china y Ron blanco, la mezcla no es muy correcta pero da lo mismo, este es tu último fin de semana de soltera, así que puedes hacer lo que quieras, quisiste que durmiéramos juntos, habían muchas camas pero insististe que fuera juntos, sin saber como, estábamos metidos entre besos apasionados, caricias llenas de deseo, sin darnos cuenta hacíamos el amor como la primera vez, claro que el miedo que sentí esa vez fue reemplazado por el conflicto de estar haciendo algo poco apropiado para amigos, sobre todo para una mujer que pronto será señora, que firmara un contrato solemne con otro ser, disfruto el momento a concho, pero no entiendo, lloras y me pides perdón, dices que no comprendes, que no sabes por que hiciste lo que hiciste, no habían palabras para consolarte, palabras que terminaran con el sentimiento de culpa que te invadía, “Debe haber sido el Ron”, fue lo que atine a decir, pero no sabia que habías planeado todo durante la semana, y que era lo que esperabas que pasara.

El día siguiente amaneció nublado, casi el punto de llover, seguías triste, el sentimiento de culpa estaba allí, incluso en las ocasiones en que repetimos el rito de placer culpable, ahora me abrazas como queriendo esconder tu cuerpo del mundo, sales conmigo de la mano, me abrazas y me besas sin motivo, esta atardeciendo y estamos sentados, apoyas tu cabeza en mi hombro, como descansando de los males del mundo, tomas mis manos y las acaricias, como para compensar dolores pasados, no quieres que hablemos, solo que miremos el horizonte juntos, mirando la caída vertical de la gaviotas en busca de su presa, el respirar de los árboles en nuestra espalda, el baile continuo de las ramas tocándose unas con otras y el ruido que hacen las olas chocando con las rocas.

3 comentarios:

J.L.Ramos dijo...

Bueno, respecto de tu post... puedo decir que también combatí en ese tipo de guerra... herí y salí herido... casi muerto... pero aquí me ves... (bueno, no me ves pero es un decir). No gané... ella no ganó... ganamos los dos. Y ahora caminamos juntos... pero no revueltos... en fin...

Sobre las historias del Tío Lucho... bueno, que puedo decir... gracias por la visita... y si buscas en mi blog... aquel capítulo de los superheroes es muuuucho mas largo... hay varios enfrentamientos previos... con cerberus... y con el mismo diablo despues... siéntete libre de revisar... para eso está el blog...

Un abrazo!!!

Aynna Dannan dijo...

Wow! qué difícil... despedirse así de un otro que ha decidido compartir su vida con otra persona... por qué era una despedida cierto? En todo caso, cero compromiso el de ella con su futura vida... o no?

Saludos

Monin dijo...

Las cosas del corazón no pueden explicarse... razones?? no gracias, las razones no sirven para entender lo que por su mente pasaba en esas horas... claro que estaba planeado... o tu crees que uno anda despidiéndose de los amigos así como así por la vida??

Cariños!!